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El cementerio de Nuestra Señora de la Soledad se inauguró el 1 de enero de 1928, convirtiéndose en el tercero y definitivo de Huelva, que vino a resolver los problemas que planteaba el aumento de población de la ciudad. Los cementerios anteriores fueron el de San Pedro (1823-1858), y el de San Sebastián (1858-1928).
El cementerio de la Soledad tiene una curiosa planta semicircular, y se encuentra dividido en seis sectores de iguales dimensiones: San Juan, San Marcos, Santiago, San Pedro, San Lucas y San Mateo. Dispone de una doble fachada, con pilares y verjas de fundición.
Entre sus dos fachadas se encuentra un pequeño espacio ajardinado que sirve como zona de transición entre el exterior y el cementerio, encontrándose en él el acceso a los distintos servicios que ofrece el cementerio.
Una vez superada la segunda fachada encontramos la Plaza de la Soledad, que constituye el eje a partir del cual se distribuyen, de forma radial, los distintos sectores. En el centro de dicha plaza se encuentran la estatua de Nuestra Señora de la Soledad y una fuente con los tritones, que pertenecían anteriormente a la desaparecida Fuente Magna de la Plaza de las Monjas.
Esta primera ruta nos acerca a la historia contemporánea de la ciudad a través de personalidades significativas de la vida política, económica y empresarial, tanto autóctonos como extranjeros vinculados al sector de la minería.
Documental "Onuba", rodado en 1939.